¡Hola! En el último programa de Alberto Chicote, donde hablan de los beneficios y mitos de los superalimentos, me llamó la atención el poder del tomate como protector solar. Es uno de los alimentos que más me gusta y más consumo a lo largo de la semana, por ello hoy he querido dedicarle un post a esta famosa hortaliza. Aquí os dejo un enlace a un post donde se recogen todos los superalimentos mencionados en el programa de Chicote.
El tomate se puede consumir de mil maneras diferentes;
- Crudo en ensaladas
- Triturado y cocinado en salsas
- Zumo de tomate
- Pasta de tomate concentrada
- Deshidratados
- Cocinados al horno
- Gazpacho
...
A parte de la novedosa propiedad de proteger frente las quemaduras solares, el tomate es conocido por su alto contenido en antioxidantes (licopeno), por ser rico en vitaminas A, B y C, minerales como el K, P, Mg.
La vitamina C también puede considerarse un antioxidante, que junto con el licopeno propio del tomate ayudan a combatir los radicales libres que se generan en nuestro organismo, generados por diferentes factores, uno de ellos, la radiación solar, que pueden dañar nuestras células.
Se ha demostrado científicamente que su consumo diario ayuda a mejorar la tolerancia al sol y así poder evitar los eritemas causados por este.
Entre otros beneficios destaca como regulador del colesterol por su contenido en vitamina B3, como fuente de K ayuda con la presión arterial y las enfermedades cardiovasculares...
Ahora para el veranito, que mejor que ¡incluir el tomate en nuestras dietas!
Nos vemos en el siguiente post,
Jen